Éramos dos amigas con un mismo sueño, aunque al principio no lo sabíamos.
Cada una, por su lado, descubrió su pasión por el mundo de la manicura.
Cada conversación, cada reunión, cada idea… nos llevó a darnos cuenta de que estábamos destinadas a construir algo grande juntas.
Lo que comenzó como una simple necesidad laboral se convirtió en un propósito:
Inspirar, transformar y ayudar a otras personas a encontrar su camino.